ERCO ha contribuido a crear el escenario para la transformación de un edificio amsterdamés del siglo XIX, De Krakeling, en un espacio de oficinas contemporáneo para la empresa neerlandesa de inversión inmobiliaria Wereldhave. Este edificio, construido en 1888 para albergar un gimnasio, se convirtió en años más recientes en un pequeño y célebre teatro.
El reto de iluminar un interior con tanto carisma consistía en satisfacer las necesidades propias de una oficina contemporánea, como la sostenibilidad, la flexibilidad y el confort visual, respetando y revelando al mismo tiempo el carácter histórico del edificio.
Kodde Architecten se encargó de la cuidadosa restauración y modernización del edificio De Krakeling, con interiores de Casper Schwarz Architects. Además de los puestos de trabajo situados en la periferia de la planta baja, en el centro del espació se integró una estructura espectacular de dos niveles, compuesta de listones de madera y vidrio. El interior de madera, que es idéntico al original, alberga más oficinas y salas de reuniones.