La Galería de las Colecciones Reales, Madrid

El modelo museístico por el que se ha optado es el lineal, con un trazado principal descendente, que comienza en el acceso situado entre el Palacio Real, la Catedral de la Almudena y el propio museo, para finalizar en la planta -3, a la altura de los jardines del Campo del Moro. Cuenta con más de 3.200m2 destinados a la exposición permanente y más de 1.300m2 para exposiciones temporales. Su visita constituye un viaje por cinco siglos del arte y la historia de los reyes de España convirtiéndose en un escaparate a la belleza, cultura y la historia de España.
Accedemos a las salas expositivas a través de una gran rampa. Desde el ojo de la rampa, a través de los pasamanos, es el único lugar desde donde se aprecia la gran altura de la construcción. En el momento de la inauguración, las naves destinadas a la exposición de las colecciones serían: la planta -1 donde se encuentran las obras del periodo de los Austrias, la planta -2 destinada a las piezas emblemáticas de los Borbones y la planta -3 donde se alberga la gran colección de carruajes. No obstante, el discurso expositivo estará en permanente transformación, por lo que necesitaremos una gran versatilidad y flexibilidad a la hora de cambiar estos espacios y mostrar la grandeza de las obras.

A la hora de diseñar el espacio museográfico y su iluminación, los arquitectos contaron con el asesoramiento profesional de la empresa Empty y del diseñador de iluminación Toni Rueda. El encargo del proyecto constaba de dos intervenciones: por un lado, iluminar el contenedor, y por el otro, el contenido.

Para unificar ambas soluciones, se instaló entre las jácenas un techo diseñado, fabricado e instalado por el departamento de arquitectura de techos de ERCO. Este techo está construido con un perfil de aluminio, diseñado específicamente para este espacio, alojado entre los pórticos a 50cm, para dejar la parte superior libre para instalaciones. El diseño del perfil fue perfectamente estudiado. Éste resuelve diferentes necesidades, como ser utilizado para el soporte de la placa de techo que ocultaría las instalaciones como sujeción para los raíles empotrados desde donde se realizará la iluminación del contenido, y confeccionado con una inclinación específica que ocultaría en su totalidad la iluminación destinada al contenedor.

La iluminación del contenedor es indetectable y está resuelta desde la parte superior del perfil que recoge un sistema lineal con una óptica específica. De esta manera, simulamos el efecto creado por la luz natural, creando los ritmos de planos iluminados y planos oscuros.

La iluminación del contenido está diseñada desde los extremos de las placas del techo donde se encuentran empotrados los raíles electrificados que serán soporte de los proyectores. Se encuentran a ambos lados de la placa para tener la posibilidad de abordar las obras con los ángulos y orientación adecuados. Además, el diseño de iluminación de ERCO para la Galería de las Colecciones Reales se basa en la integración de la luz en la arquitectura. De esta manera, las luminarias elegidas, discretas y elegantes, se fusionan con la estructura histórica y arquitectónica del lugar, respetando su estética y su legado. Se optó por este sistema de proyectores ya que podrán ser utilizados de una manera muy flexible, pudiendo así realizar futuras intervenciones o cambiar la organización y percepción visual dependiendo de la exposición temporal.

Para la iluminación del contenido, de las obras expuestas en este emblemático espacio, nos enfrentamos al desafío de una arquitectura de estas dimensiones, con alturas de los 6 a 8 metros y gran diversidad en el tamaño y material de las piezas a contemplar. Descubrimos desde tapices de gran formato, carrozas, trajes, armaduras, vasijas, etc.

Esta gran variedad de tamaños y volúmenes es imprescindible tenerla en cuenta a la hora de elegir el producto con el que iluminar. Se seleccionó una familia de proyectores flexible, que ofrezca prestaciones muy versátiles, para poder abarcar todas las obras. Así, con la misma apariencia exterior del producto, obtenemos diferentes ópticas para el control absoluto de la luz, podemos variar la intensidad de ésta según las necesidades de la obra.

Para los espacios altos, los haces de luz estrechos son esenciales para obtener un elevado confort visual. Por esta razón, se emplean lentes cerradas como narrow spot, spot y flood. Dándoles la orientación y ángulo adecuados, se consigue bañar y acentuar únicamente la obra, y no el resto del entorno. También influyen las distancias desde las que proyectemos. Una distancia mayor requiere una potencia mayor para lograr niveles de iluminación similares en comparación con distancias más cortas.

Gracias a la tecnología y control óptico de ERCO, sus proyectores no deslumbran directamente. Uno de los proyectores suministrados para este espacio es Eclipse InTrack con una lente para la reproducción de contornos con bordes nítidos mediante regulador de contornos. Este proyector permite generar haces de luz libremente ajustables y nítidamente delimitados. Mediante un simple giro de la lente, se puede ajustar sin escalonamiento el diámetro del haz de luz desde spot (15º) hasta wide flood (65º). Es especialmente aconsejable para una iluminación de zonas con objetos expuestos cambiantes.

Se necesita determinar individualmente la sensibilidad espectral de los objetos de la colección. Un espectro luminoso con escaso efecto nocivo es imprescindible para la presentación del arte acorde a los criterios de conservación, pudiendo garantizar LEDs de alta calidad para evitar los componentes UV e IR en el espectro. Categorizamos en obras con fotosensibilidad baja (sin restricciones), con fotosensibilidad media (200lx) y fotosensibilidad alta (50lx). Y se tiene en cuenta el tiempo a la exposición como factor determinante. Cada material, desde tapices, manuscritos, textiles, óleos, policromías, metal, piedra deben se iluminados de manera específica.

Teniendo en cuenta esta particularidad, el contenido esta tratado con una iluminación más escénica, jugando con luces y sombras, donde generamos diferentes focos de atención para el observador. Por ejemplo, con este juego de contrastes, resaltamos los detalles escultóricos de estas cuatro imponentes columnas salomónicas. La luz dibuja los detalles y relieves dorados del fuste de las columnas decoradas con hojas de vid y racimos de uvas, y revela el intenso azul lapislázuli que se rescató tras la restauración. Estas columnas miden 5,65 metros de altura, con lo que utilizamos proyectores con ópticas muy cerradas, esenciales para un elevado confort visual. Además, permiten dirigir la luz únicamente donde queremos resaltar.

Gracias a la innovadora tecnología proporcionada por los productos ERCO, conseguimos mediante una misma familia de proyectores una gran versatilidad de haces luminosos, variedad de potencias, un elevado confort visual y un control determinado para las luminarias.

Los proyectores empleados nos permiten dirigir la luz de manera precisa, eliminando deslumbramientos y protegiendo las obras, garantizando que los visitantes disfruten de la experiencia visual en su máxima expresión. Los LEDs energéticamente eficientes y con excelente reproducción cromática son esenciales para crear la atmósfera adecuada en este espacio histórico y mantener las intenciones de los artistas. Además, todos los proyectores implementados en esta obra son DALI, para lograr un control absoluto de la instalación.

En conclusión, la Galería de las Colecciones Reales es un ejemplo impresionante de cómo la iluminación innovadora puede elevar una colección de arte a nuevas alturas. Con los principios de iluminación de ERCO y la elección de luminarias de alta calidad, se ha logrado una experiencia única para los visitantes. Esta colaboración entre la tradición y la tecnología moderna demuestra que la iluminación puede ser una forma de arte en sí misma, capaz de realzar y proteger nuestro patrimonio cultural.