Los espacios claros suscitan la asociación al día y la sensación de presencia, mientras que la oscuridad juega con temas tales como la noche, el descanso y el recogimiento. Si lo claro y lo oscuro aparecen muy juntos, las sensaciones alternan entre los dos polos ambientales. El techo luminoso genera, de forma comparable a la luz del cielo difusa, una luz suave para la iluminación básica. Además, la luz diurna penetra en la sala desde la izquierda. El bañado de la pared define la vertical en la sala. A fin de escenificar puntos de atracción visual, la luz de acento de los proyectores realza objetos individuales. Las luminarias pendulares acentúan la mesa.